El 21 de Marzo el juicio por la denominación Lotus

La Fórmula 1 está viviendo esta pretemporada uno de los más rocambolescos casos que se recuerdan, hasta el punto de que en los primeros test de Cheste el martes que viene, habrá cuatro coches con la denominación de Lotus. Unos pintados de verde y otros de negro y oro.
Hoy mismo un juez inglés ha puesto fecha para analizar a fondo el caso, el 21 de marzo, con el Mundial ya entrado en la segunda carrera en Australia. Una de las partes, el Grupo Lotus intentó solucionar por la vía rápida el conflicto contra la otra, el Team Lotus, pero el juez necesita más tiempo. Se interpreta como una leve victoria de los actuales propietarios del nombre, los malayos del coche verde que han disputado este año el campeonato quedando 10º como el mejor de los nuevos equipos.
La situación es poco menos que delirante. Lotus, la firma de coches inglesa, es de propiedad mayoritaria de la firma malaya Protón, apoyada por el estado asíatico. La FIA abrió la puerta en 2009 a nuevas licencias y otorgó una al proyecto 1Malasia, que alcanzó un acuerdo de cinco años con Lotus para fabricar el chasis y usar el nombre. Una licencia deportiva, mientras que la de los coches de calle, seguía en posesión inglesa.
Allí entraron como financiero el exitoso Tony Fernandes, con la dirección técnica de Mike Gascoyne y una sede de trabajo en Inglaterra. La inversión se estima que fue de 80 millones de euros para ir dando los primeros pasos de un equipo que quizás era el más serio de los nuevos.
Sin embargo, a finales de 2009 la llegada del experto en márketing Dany Bahar, desde Ferrari, a la jefatura de la marca inglesa, cambió de la noche al día la filosofía del equipo. Bahar quería un Lotus fuerte, lejos de la imagen endeble que ha dado este año el mítico escudo y colorido que hizo historia en la Fórmula 1 en los años 60 y 70. Quiere también ir a la Indy y expandir la marca. "Quiere hacer un Ferrari y eso no es posible. Nosotros hacemos coches de carreras y ellos solo de calle, por lo que solo pueden patrocinar coches de carreras", dijeron desde el bando contrario. Y no hubo acuerdo con los actuales explotadores de Lotus, más proclives a hacer un equipo familiar e ir creciendo "bajo el espíritu del original fundador".
El resultado ha sido que el Grupo Lotus, el de Bahar, alcanzó el pasado mes de diciembre un acuerdo con la escudería Renault para esponsorizarle por un plazo de 10 años, compró buena parte del accionariado del equipo y junto con Genii Capital, es dueña de la mitad de la escudería. El equipo se llamará Lotus Renault.
Se da la caótica coincidencia de que el Grupo Lotus es medio propietaria de Renault, que a su vez da sus propulsores al otro Lotus, el malayo. Es decir, a los dos equipos. Además el que fabrica el chasis con nombre Lotus según la FIA, son los malayos, mientras que en el caso contrario figurará como equipo Renault. Es decir, que el Grupo Lotus de Bahar sólo es esponsor principal de Renault, además de copropietario, mientras que los malayos de Fernandes construyen un chasis Lotus y corren como Lotus con todas las de la ley.
Hay dos frentes abiertos, por un lado, Fernandes defiende que el Grupo Lotus, el de Bahar, terminó ilegalmente un acuerdo que ambos tenían para usar el nombre de Lotus durante cinco años, aunque también tiene otra causa abierta contra ellos porque tampoco le dejan correr bajo el nombre de Team Lotus en 2011.
"Hay mucha confusión sobre el caso de hoy. No es sobre quién es el propietario del nombre de Lotus; eso fue en noviembre. El caso de hoy es el desesperado intento de Group Lotus para usar su acuerdo de licencia ilegalmente finalizado de Lotus Racing al decir que 1Malaysia no puede usar el nombre de Lotus. Así que nada cambia en Team Lotus", dijo ayer Fernandes.
Por si estuviera poco liada la madeja, resulta que Proton, la propia casa propietaria del Lotus inglés, no apoya a sus propios protegidos, los malayos, sino que ve con buenos ojos el nuevo impulso que cobraría la marca bajo el paraguas de Renault, mucho más competitivo. Y aún hay más. Los herederos de Colin Chapman, fundador de la compañía, están también del lado de Bahar, les gusta el futuro junto a Renault.
La solución, o al menos el inicio de solución de este Lotus contra Lotus, arrancará en un par de meses. Aunque luego podrán apelar. Ya lo dijo Jarno Trulli "es completamente surreal lo que está pasando en este equipo".

Marca

La han liado bien liada, la lLotus del pasado año dice tener un acuerdo para usar el nombre "lotus" durante cinco años y además le prohiben correr con dicha denominación, mientras alguien ha desembarcado en Reanult con el consabido Lotus, así que el 21 de Marzo comienza el juicio