Previo GP de Inglaterra

Allí estaba Max, enfundado en su traje de 3000 dólares, y una camisa blanca. Lo único que desentonaba era esa corbata multicolor, como queriendo dar un poco de alegría en la fiesta. Pero allí estaba a fin de cuentas, ¿se había bajado los pantalones el duro de Mad Max Mosley? Sin duda, nada de tope de 45 millones, pongamos… ¿100? Sí, 100, y no sólo eso, sino que los sueldos de las estrellas no están incluidos; y por supuesto se retira el tema del doble reglamento. ¿Y qué sacaba Mosley de esta reunión a la desesperada el jueves antes de sacar la lista definitiva de la FIA? Por supuesto, que la F1 no se convirtiera en una especie GP1, y que los constructores suministraran coches cliente. Algo que, por otra parte, ya estaban dispuestos a hacer, claro. Pero, el problema, es que se ha encontrado un grupo de constructores infinitamente más fuertes de lo que esperaba. (Casi) Unidos como una piña, a fin de cuentas los pobres diablos de Force india, o Williams, pintan menos que el horno de Carrie en Sexo en Nueva York, (ella dice que lo utiliza de armario), los constructores son un núcleo duro, y van a por todas.

Repito. A por todas, y eso también le toca a Bernie, claro. Una vez cabreados, unidos, y con Ferrari detrás de ellos, van a por la banca, y lanzan un órdago de los grandes, de los que de verdad mueven los cimientos. ¿Por qué sino estaba Bernie con una infección de oído tremebundo el fin de semana Turco? Pues porque se había quitado de en medio en un intento desesperado de que no le tocaran sus contratos, sus millones, su negocio, donde él se queda más del 70 % de los beneficios, o así, y los equipos sólo el resto.

En definitiva, creo que la jugada les ha salido rana tanto a Max, como a Bernie, han estirado demasiado de la cuerda, y han propiciado una revolución de sus ‘trabajadores’. Ha llegado un punto que la situación es tan tirana, tan mezquina, que ante tal desesperación la FOTA se ha hecho fuerte, es decir, un poco del estilo de morir con las botas puestas. A fin de cuentas, por muy listos que sean Max y Bernie, tenemos del otro lado a Luca y Flavio. ¿Por quién apostarías tú en una pelea de esas dimensiones?

Así que este par de chicos ya no tienen bastante con las normas de la FIA, porque ahora también quieren el dinero de la FOM. Fue así como nos presentamos, casi sin quererlo, en el medio día del viernes, 13 de Junio, y no pude evitar que el momento me sonara a aquella película de Steven Spielberg, La lista de Schindler, donde el empresario alemán salvaba a un millar de judíos polacos de los nazis. En este caso, conociendo el pasado nazi del padre de Mad Max Mosley, y su gusto por los juegos sexuales nazis, no deja de tener gracia la situación, ¿verdad? Estábamos ante la película soñada de Max, su redención: "la Lista de Mosley".

Este iba a ser el día definitivo, el del juicio final, el de la salvación de la F1. Voy a ahorraros la enumeración de quien estaba en la lista, o no, porque está claro que la lista no servía ni para limpiarse los morros en el McDonals que hay debajo de mí casa. No era más que un aplazamiento de la guerra que iba a continuar más allá, y que sólo sabremos cómo acaba en las próximas 48 horas… o quizás más tarde.

Uno(s) de los nuestros

Evidentemente los más contentos de la clase eran los nuevos. Los chicos de USF1 y el capitán América, Peter (Pan) Windsord, a la cabeza, seguidos de Manor GP (disculpadme si os digo que no sé muy bien de dónde han salidos estos), y sobre todo uno de los nuestros: Adrián Campos.

Dejadme que me remonte unos meses, pues esto me recuerda una entrevista que tuve con Adrián en Septiembre de 2008 para www.thef1.com. Hay que recordar, que por esas fechas de 2008, hacía un mes que se había celebrado el GP de Europa en el Valencia Street Circuit, así que era inevitable no preguntarle su opinión, y también sobre su ‘ausencia’.

Él, como siempre, cortés y educado, nos dijo que no se había dado la ocasión, pero que el GP había sido magnífico, y que le deseaba mucha suerte a Aspar y compañía en su proyecto. No obstante, se le notaba un halo de cierto amargor de no ser partícipe del proyecto, y nos dijo que no hubiese tenido problema en aportar su experiencia. Así que le siguió otra pregunta, al respecto del GP, y que ciertamente me despisto bastante.

Según parece, el nombre del GP del Mediterráneo estaba registrado por Adrián Campos, así que cuando Bernie Ecclestone fue a registrar dicho nombre, para poder utilizarlo en algún GP futuro, o tenerlo de comodín para en el GP de Valencia si fuera necesario, se encontró con que el bueno de Adrián se había adelantado. Así que le preguntamos cómo fue dicha negociación con Bernie, pues por esas fechas el nombre susodicho ya pertenecía a Ecclestone.

Con esa sonrisa diáfana que caracteriza a Adrián nos dijo que muy fácil, se lo había cedido y ya está. Así de claro, le había cedido el uso del nombre "Gran Premio del Mediterráneo"a Bernie por las buenas, y sin coste alguno. Sinceramente me quedé de piedra, yo a Bernie, pensé, no le iba a perdonar ni un paquete de cromos de la Bruja Lola, y allí estaba Campos regalándole algo que valía millones ¿cómo era posible? ¿Qué me estaba perdiendo?

Ahora tenéis la respuesta, claro. Adrián es zorro viejo, inteligente como él sólo, y sabía que llegado el momento vale la pena que el Dios absoluto de la F1, alias Bernie Ecclestone, te deba un favor, ¿verdad, Adrián? Me alegro un montón por ti, compañero, no hagas demasiado caso de la envidia, algo que nunca he pensado que sea sano como dice ese dicho, y ante todo, y sobre todo: ¡¡enhorabuena!!

Y antes de adentrarme en el GP no podía pasar si felicitar a otro de los nuestros, Marc Gené, el brillante ganador de las 24 horas de Le Mans. Un hito histórico del automovilismo español, que fue menospreciado por muchos medios de comunicación de nuestro país, y sobretodo en la televisión pública que pagamos todos. Ni una sólo referencia a tan tremebunda victoria, algo sólo al alcance de los grandes, y un record que nunca podrá quitarte, Marc: ¡enhorabuena de todo corazón!, y que sepas que, el año que viene, intentaré ver en vivo y en directo la defensa de tu título.

Silverstone, historia viva muerta

Una vez más el artículo se diluye entre las guerras fraticidas de las 3 ‘F’ (FIA, FOTA, FOM), así que visto que no puedo solucionar nada, sólo esperar a esa lista del viernes, voy a intentar centrarme en las carreras, porque no podemos perder de vista que estamos en Silverstone, la auténtica catedral de la F1, un lugar de leyenda.

Un lugar que vio la primera victoria de Ferrari en F1, en 1951, a manos de Froilán González, y que dice adiós a 59 años de historia de la F1 tal y como la conocemos. ¿Cómo podemos llegar a esto? ¿Es de recibo que nos quedemos con ‘pestiños’ como el Hungaroring, o recortables de cartón-piedra como Bahrein, y ‘pasemos’ de Silverstone?

Hemos pasado grandes momentos, pero para mí, nada como 2005, con aquella lucha en la primera vuelta entre el añorado Juan Pablo Montoya y Fernando. En paralelo por Copse y por esas eses maravillosas, Maggots y Beckets, y para cuando llegaron a Chapel, JP casi que quedaba bendecido para su primera victoria con McLaren. Fernando, por supuesto, alerta de no perder el hilo, no le disputó la posición todo lo que hubiese querido, sólo intentó, con toda la limpieza del mundo, mantener su pulso con Juancho sin llegar a las manos. Pero Juan esta desatado, y reclamaba mayor atención de McLaren, así que sólo pudo dejarlo, él pensaba en el Mundial de 2005, y con eso tenía bastante.

La primer aparte de Silverstone es como la música de Mozart, fluida, ligera, rápida y vibrante, una verdadera obra maestra, quizás por eso fue una pena que Fernando no respondiera con toda su artillería. Aprovechando el tirón de la primera vuelta de estas dos estrellas, esta seguiría por Stowe. Una curva de recuerdo negro para Michael, pues aquí tuvo, en 1999, el accidente más grave de su carrera; mucho agarre para un frenada bestial.

El circuito está en medio de la campiña inglesa, a fin de cuentas es un antiguo aeródromo, así que el viento racheado del norte no es extraño que aparezca, y entonces la delicada aeródinamica de los monoplazas se resentirá. El asfalto nunca ha sido demasiado abrasivo, y si se mantienen unas temperaturas frescas habrá con ir con cuidado con el ‘blistering’, no hay nada que le guste más al susodicho que un día frío, un asfalto poco abrasivo, y unas ruedas nuevas. En cuanto a la carga aerodinámica, como tenemos curvas de todo tipo, es de medio a alto. Copse o Bridge necesitaran de buena inserción y paso por curva, y en Stowe, o Abbey, de estabilidad en frenada, y toda la tracción posible en la salida.

De estrategias, es lo de siempre, se trata de la típica carrera de dos paradas, digamos con una primera parada para los Brawn GP en la vuelta 16 o 17. El resto de los mortales les seguirá, salvo que a Sebastián Vettel le de por intentar de nuevo la pole con 12 o 13 vueltas. Parece que Mark Webber, después de recuperarse de sus lesiones, está dándole fuerte al joven Sebastián, y aquí las cosas debería de seguir en el mismo camino, pues la curvas rápidas no son la especialidad del joven alemán.

En cuanto al duelo de Button y Barrichello, creo que puede ser definitivamente la oportunidad de Rubens. Hasta ahora Jenson no ha sentido presión alguna, y basta la expectación que se está creando en Inglaterra para que la máxima tensión funda los plomos del más pintado. Por primera vez, Jenson, va a sentir todo un país detrás de ti, y eso no es tan fácil de llevar como parece. A Rubens le encanta Silverstone, ganó en 2003 para Ferrari, y en 2008, bajo la lluvia, dio un recital de los buenos llegando a una honorable tercera posición, esta su oportunidad, y ¿qué mejor que darle al enemigo donde más le duele?

El que no estará en el mismo lugar que el año pasado será Lewis Hamilton, que, en 2008, si bien en calificación sufrió esa presión a la que me refería, y fue batido por Kovalainen, en carrera, bajo la lluvia, hizo su mejor carrera hasta la fecha. Ganó con más de un minuto al segundo, y encandiló a su público con su victoria. Bien, una vez recordado esto, quédate con la copla, que no volverá a pasar nada parecido, pues llueva o nieve, el MP4-24, o la segadora mecánica como la llamé esta pretemporada, no está hecha para las curvas de alta velocidad, así que pasar a la Q3 será toda una hazaña.

Un poco lo mismo tendremos para Fernando, pues visto el desastre del R29 en Turquía no podemos esperar mucho aquí. Bob Dell, dice que traen piezas nuevas, un alerón delantero, unas modificaciones en el difusor, ¿pero quien no trae piezas nuevas? Lo que hace falta es que funcionen, y las referencias de Estambul son malas tirando a funestas.
En cualquier caso, aún nos queda una carrera por disfrutaren este templo de la velocidad… y de la F1.

El adiós de la historia

Silverstone ha seguido el camino de Imola, y otros viejos escenarios europeos, llenos de historia, tradición y público. Las excusas de las instalaciones deficientes, o la ausencia de seguridad, son sólo eso, meras excusas. La única realidad, es que ha sucumbido al nuevo capitalismo de Bernie, donde lo único que importa es un organizador que ponga 25 millones y un escenario donde poder aparcar los barcos de los famosos. Con las televisiones de por medio, no importa si no va ni Cristo bendito a las carreras, lo de menos son las curvas míticas como Copse, o Acqua Minerale, lo de más son los nuevos millonarios, sobre todo si tienen petrodólares.

Es verdad que Bernie hizo mucho por la F1 hace años, la sacó de la miseria y la mayoría de jefes de equipo ahora son millonarios a él. Es verdad que si ves el paddock de Moto GP y lo comparas con el de la F1, se sabe donde está la ‘pasta’. Pero ha llegado un punto donde la F1 también tiene que hacer algo por Bernie y decirle: ¡basta! Estamos hartos de circuitos de Tilke (Manos-tijeras), y de gradas insulsas y vacías, y de chapuzas como la de Malasia 2009: ¡basta ya! Si esta es la nueva F1, sin Silverstone, sin Imola, sin Ferrari, sin McLaren, sin Fernando… ¿Qué nos queda? ¿Vale la pena?

Curiosamente, nos vemos de nuevo en Silverstone, donde empezó todo. Un 13 de mayo de 1950, se celebró aquí el primer GP de F1 de la era moderna. ‘Nino’ Farina fue el vencedor, aunque eso es lo de menos, claro, pues hasta la fecha a esa lista de vencedores se han ido sumando otros grandes nombres, como Ascari, Fangio, Moss, Villeneuve, Stewart, Clark, Senna, Prost, Schumacher, Alonso o Hamilton, pero este año será el último, esta será la 43 edición y la última.

El destino es muy caprichoso, y gusta de esas estructuras cíclicas que tanto utilizo, y que acaban por donde empiezan. Es como la pescadilla que se muerde la cola. ¿Acabará la F1 en el mismo sitio donde empezó?... ¿o es sólo el comienzo de una nueva época?

¿Se podrán de acuerdo las 3 F’s?; ¿Está acabado de verdad Silvertone?; ¿Será la lista de Mosley la defunción definitiva de la F1? …¿o será su salvación?
¿Que tal suena: Grand Prix FOTA World Championship Silverstone 2010?

Demasiadas preguntas, ya lo sé. Dudas y miedos, los que cualquier apasionado de este deporte tiene. La lista de Mosley, que publicarán el viernes, marcarán la F1 del futuro, para lo bueno y para lo malo. Ojalá, aparezcan todos los que tienen que aparecer, aunque siga siendo de forma condicional como las últimas veces, que sigan las negociaciones que nos lleven a todos a buen puerto, y que este sólo sea el inicio de un nuevo Pandemónium.

Pandemonium, sí, según el poeta inglés John Milton, la mismísima capital del infierno…

f1.com

Se que es muy largo el artícuklo, pero en tono distendido da un repaso a todo, desde el conflicto de la FIA-Fota, lo de Adrián Campos y su escudería y explica muy bien la historia y el circuito de Silverstone que va a desaparecer, no me enrollo mucho ya que , quien quiera, tiene mucho que leer,