Nadal hace «Príncipe» a Federer

De vez en cuando, Rafa Nadal y Roger Federer descargan toda su violencia a bolazos el uno contra el otro. Batallas agónicas que duran cinco horas, apenas alejados unos metros y separados por la red. Periódicamente se citan en las finales de los grandes torneos y juntos escriben en letras doradas los capítulos más brillantes del tenis moderno. Con el debido respeto a los clásicos, el español y el suizo reinterpretan la historia de este deporte, acumulan títulos en currículos interminables y rompen muchos de los registros vigentes desde hace décadas. De la esencia del tenis conservan su caballerosidad y el respeto mutuo por el rival, en la victoria y en la derrota. Nadal y Federer suman muchas horas a palos dentro de una pista. La última paliza, el domingo pasado en Australia. Victoria de Nadal, que supera ampliamente a su gran rival en los enfrentamientos particulares (13-6). El mallorquín aterrizó ayer en España y sorprendió con un gesto inesperado. Propuso al suizo para el premio «Príncipe de Asturias» de los deportes -cuyo fallo tiene lugar en septiembre-, el galardón que él mismo logró en 2008 y al que había optado el año anterior en una candidatura conjunta con el propio Federer. Los dos mejores tenistas de los últimos años han desarrollado una especie de síndrome de Estocolmo. Luchan a muerte en la pista y se admiran fuera. Fue Nadal el que primero se declaró, cuando Federer aún no temía por su cetro y sólo cedía ante el gladiador en la arena de Roland Garros. Las lágrimas del suizo en Melbourne significaron la cesión del cetro que ya había entregado al perder el número 1 el pasado agosto, también cuando cedió en la hierba de Wimbledon, donde todavía se le creía invencible. «Se merece este galardón por su trayectoria en el tenis, teniendo en cuenta que sólo le queda un Grand Slam para igualar el récord de 14 que tienen Pete Sampras». Lo dijo Nadal al poco de aterrizar, «cansado» en el aeropuerto de Palma de Mallorca, tras 40 horas de viajes desde Australia. Anunció así su intención de presentar la candidatura de Roger Federer. «Como tenista y como persona, Federer es excepcional», dijo Nadal, que precisó: «Lo he tenido yo y por supuesto que me gustaría que un compañero de trabajo, además de un buen amigo, también lo tuviera. Se lo merece». Instantes más tarde, la Fundación Príncipe de Asturias apareció para confirmar el apoyo de Fernando Alonso -galardonado en 2005- a la iniciativa de su amigo Nadal. Lo mismo que Michael Schumacher, premiado en 2007 y que también se sumó a la idea.

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Apoyo la petición de Nadal, secundada por Fernando Alonso y por Schumacher, Federer es, a día de hoy, el mejor tenista de la historia, el tiempo que portó el número uno lo dice, se lo merece y la Fundación Príncipe de Asturias se hará eco de la misma.

Da gusto con los tenistas que, salvo raras excepciones, siempre están demostrando una gran deportividad qu edebería ser copiada para los demás deportes ya que es eso deporte.

Rafa, siempre lo digo, no parece real, parece un sueño, es como si te preguntaras ¿cómo quiero que sea un deportista?, y lo es dentro de la pista un fiera, trabajador incansable, inteligente en el manejo de los "tempos" de los partidos etc... y fuera todo un señor, educado, atento, sencillo, sincero, agradable,expresivo, es como la respuesta a la anterior pregunta, es un honor ser del mismo país que él, qué seguridad transmite.

Federer de merece ese premio.