La copa Davis vuelve a Praga, donde la capturaron Ivan Lendl, Tomas Smid, Pavel
Slozil y Jan Kodes hace 32 años para la entonces Checoslovaquia. Radek Stepanek
logró el punto definitivo al imponerse a Nicolás Almagro por 6-4, 7-6 (0), 3-6 y
6-4 y 6-3 en tres horas y 52 minutos. España pierde así su cuarta final de la
competición, tras caer en Australia en 1965, 1967 y 2003. El excelente
trabajo de David Ferrer, que demolió a Tomas Berdych para igualar a dos la
serie, no encontró refrendo en Nicolás Almagro, a quien el desafío le vino
grande. La derrota en modo alguno puede considerarse un fracaso de los
defensores del título y pentacampeones, que siguen siendo de largo el mejor
equipo del siglo XXI. La final número 100 de la competición hizo honor a tan
significativa efemérides. Fue intensa e incierta de principio a fin y muy
brillante por momentos.
El grito de estímulo de "¡Radek, Radek!" de las cerca de 14.000 personas que hoy sí han llenado el O2 Arena tomó el signo de aclamación cuando se consumó el triunfo. A sus 33 años, Radek Stepanek se convierte en el tenista más veterano en resolver una final desde que el irlandés James Parke, con los colores de Gran Bretaña, superó al australiano Rodney Heath por 6-2, 6-2 y 6-4, en 1912, cuando el torneo todavía se disputaba por el sistema de 'challenge round', según el cual el ganador del título no disputaba eliminatoria alguna el año siguiente a la espera de rival. Fue hace un siglo. Hoy, con un tenis que mantiene ciertos rasgos identificativos con el clasicismo de antaño, el segundo jugador checo ha dado la victoria, por tecera vez en su carrera, al conjunto del Este. Esta vez con la magnitud del título.
En la gran oportunidad de su vida para reivindicarse y colocar su nombre a la altura que merece, Almagro se dejó llevar por un tenis demasiado visceral y acabó atrapado en la red de un hombre que supo absorber como le convenía una atmósfera hoy sí ardiente en el O2 Arena.
elmundo
Almagro no supo acabar el gran trabajo de Ferrar pero España ha sido digna finalista, ENHORABUENA!
El grito de estímulo de "¡Radek, Radek!" de las cerca de 14.000 personas que hoy sí han llenado el O2 Arena tomó el signo de aclamación cuando se consumó el triunfo. A sus 33 años, Radek Stepanek se convierte en el tenista más veterano en resolver una final desde que el irlandés James Parke, con los colores de Gran Bretaña, superó al australiano Rodney Heath por 6-2, 6-2 y 6-4, en 1912, cuando el torneo todavía se disputaba por el sistema de 'challenge round', según el cual el ganador del título no disputaba eliminatoria alguna el año siguiente a la espera de rival. Fue hace un siglo. Hoy, con un tenis que mantiene ciertos rasgos identificativos con el clasicismo de antaño, el segundo jugador checo ha dado la victoria, por tecera vez en su carrera, al conjunto del Este. Esta vez con la magnitud del título.
En la gran oportunidad de su vida para reivindicarse y colocar su nombre a la altura que merece, Almagro se dejó llevar por un tenis demasiado visceral y acabó atrapado en la red de un hombre que supo absorber como le convenía una atmósfera hoy sí ardiente en el O2 Arena.
elmundo
Almagro no supo acabar el gran trabajo de Ferrar pero España ha sido digna finalista, ENHORABUENA!
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