miércoles, 12 de noviembre de 2008

Samuel Sánchez, propuesto para el «Juego Limpio»







El secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissaveztky, alabó ayer el «detallazo» del ciclista asturiano Samuel Sánchez de querer compartir su premio, 94.000 euros, por el oro olímpico con el resto del equipo, un gesto que hará que el dirigente le proponga para el Premio Nacional del Deporte «Infanta doña Elena», que distingue el juego limpio. «Que Samuel Sánchez haga esta propuesta da idea de que es un magnífico deportista, de su altura moral, es un detallazo. Enhorabuena para él. No sé si habrá otros casos, pero le propondré para el Premio Nacional al Juego Limpio», indicó Lissavetzky. Samuel Sánchez ha anunciado su intención de repartirse el premio asignado a los campeones olímpicos con sus compañeros de equipo en Pekín, Carlos Sastre, ganador del Tour de 2008, Alejandro Valverde, plata y bronce en el Mundial en ruta, Óscar Freire, tricampeón del mundo, y Alberto Contador, vencedor del Giro, Tour y Vuelta. Sánchez ganó el oro olímpico en Pekín el 9 de agosto por delante del italiano Davide Rebellin y el suizo Fabian Cancellara, y se convirtió en el primer ciclista español en lograr el título olímpico en carretera. Cena con la peña. Samuel Sánchez recibirá el cariño de su peña en la cena que se organiza el día 21, a las 21 horas, en el Castillo de la Zoreda (La Manjoya) donde acuden unas doscientas personas. En esta sexta edición el campeón olímpico entregará muchos regalos y prendas del equipo Euskaltel para sortear entre los asistentes.



Olé por Samuel, qué gran campeón, si es que entre Nadal, Alonso, Sergio García, Pau Gasol etc... estoy que no quepo dentro de mí, !qué orgullo!, son grandes trabajadores, se convierten en los mejores y como si tal cosa, además tienen la cabeza muy bien amueblada.


Chicos es un placer ser de la misma zona del palneta que vosotros, y no digo ni la mitad de lo orgullosos que me hacéis sentir...



2 comentarios:

pro_magicalonso dijo...

Ole por Samu que grande es. Saludos

silvo dijo...

Lo es, parece increible que este chico al que veía pasar en bicicleta sea tan grande,, es todo constancia.Saludos