Dietrich Mateschitz ya prepara el terreno para una posible mala actuación de Red Bull este fin de semana en el GP de Australia. Hace un mes los problemas no preocupaban pero esta vez el discurso ha cambiado: "Nuestro dominio quizás ha acabado". Eso sí, el dueño de la escudería que ha arrasado durante las últimas cuatro temporadas no espera quejas de parte de su piloto estrella: "Sebastian Vettel ha tenido un coche ganador durante cuatro años y medio con Red Bull. No creo que tenga problemas para afrontar la situación actual. Él, como todo el equipo, aceptará el desafío".
"Tengo dos corazones en el pecho: como aficionado de la Fórmula 1 estoy contento porque el Mundial se anuncia más interesante y equilibrado; como propietario de un equipo de F-1 tengo que aceptar las nuevas normas y vencer este nuevo desafío", sentencia el fundador de la empresa de bebidas energéticas.
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De ser cierto eso Vettel intentará irse cuanto antes a una escudería que domine
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