El máximo dirigente de McLaren quiso dar la bienvenida a la F-1 a Marco. Primero espera que, a diferencia de estos años en los que ha dominado Red Bull y ahora lo hace Mercedes, la F-1 regrese a la tradición: “Es cierto que buena parte de la historia de la Fórmula 1 se ha pintado sobre lienzos cuya imagen es una lucha titánica entre Ferrari y McLaren, que se remonta ahora a casi medio siglo. En McLaren nos proponemos empezar a aumentar pronto esa cifra y estoy seguro de que Marco comparte la misma ambición en Ferrari, le deseo suerte”.
Suerte sí, éxitos es otra cosa. Y Ron avisa a Mattiacci: “La posición de jefe de equipo de Ferrari es claramente importante y espero que Marco aprecie lo enorme que es la tarea que tiene por delante, así como la oportunidad que le han brindado”. Dennis intenta explicar al nuevo que en esto no hay sentimentalismos: “Será duro para él. Lo sé mejor que nadie. La F-1 no es una competición que se digne en intentar comprender nada respecto a las exigencias que existen, a veces agotadoras, pero cuando las cosas se ponen duras, tú también has de serlo”. Mientras, Mattiacci al final de la jornada saludaba a un periodista como si el reportero tuviera algún tipo de enfermedad y en Italia había quien decía que el resultado de Alonso de ayer era porque ya no estaba Domenicali. Qué cosas... Dennis también se acordó del anterior jefe rojo. “Stefano es un tipo agradable y competente, y le deseo lo mejor en cualquier decisión que tome en su carrera”, declaró.
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Esperemos que este nuevo Jefe de Ferrari sea lo suficientemente listo como para moverse entre tanto tiburón y no cometa el error histórico que rú has cometido en 3007
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