"No diría que es incompleto, no es esa la palabra", dice meditando sobre la situación. "Una vez que me ponga el casco, todas esas cosas se me olvidan. Lo que me da es mucha rabia, porque siempre me imaginé un debut en la F1 junto a Fernando en pista. Me da rabia porque es mi ídolo, mi héroe y quería tenerlo al lado. Lo importante es que se recupere, que esté bien de salud y creo que lo vamos a tener de vuelta en Malasia", dice el piloto de Toro Rosso.
Los test de invierno han sido aprovechado correctamente, según su criterio, aunque ahora llega el momento de ver la situación respecto a los rivales. “Es muy difícil saber cuánto bien lo has hecho. Creo que por mi parte y por la del equipo, los deberes están hechos y ahora toca ver dónde estamos en realidad. Confío en que estemos delante y que tengamos un buen coche y un buen piloto”, dice mientras sonríe al hablar de sí mismo en tercera persona.
La presión añadida le llega por el hecho de debutar junto a un récord viviente, Max Verstappen, que arrancará el domingo con 17 años en una parrilla de F1. Carlos cree que llega en las mismas condiciones, algo que no sucedió en 1 de febrero en los primeros entrenamientos invernales. "Cuando salimos a pista en Jerez, él tenía bastante más experiencia con el equipo. Había realizado los dos test de Abu Dabi y cuatro viernes [en 2014] y quieras o no se notaba que tenía más por la mano el coche. Yo en Jerez llegué de nuevas tanto en el coche como en el equipo. Tuve 12 días para pillarle y ponerme a su nivel y creo que lo hemos conseguido", dice con ese plural que en realidad le incluye a él solo.
El que con tres juegos de ruedas el joven holandés no pudiera batir el mejor tiempo de Carlos en los test de Barcelona no es considerado por Sainz como una pequeña primera victoria o una satisfacción. “Es muy difícil decirlo, porque en los test, las condiciones de pista cambian y el equipo prueba cosas constantemente. Las condiciones no suelen ser idénticas. Siempre es mejor estar por delante, pero creo que veremos cosas diferentes en Melbourne”.
Tampoco ve como un agravio que hoy el holandés estuviera, junto a Hamilton o Vettel en la rueda de prensa oficial de la FIA. No piensa que exista un viento a favor generalizado a favor de Max. “No lo creo. Es normal que cuando debuta un chaval de 17 años haya tanta expectación. A mí no me queda más remedio que aceptarlo y centrarme en mí mismo. Yo sé perfectamente lo que soy capaz de hacer, lo que me afecta la presión y lo que no. Tengo cierta experiencia y no me como la cabeza”, rebate con elegancia.
De hecho se apoya en una formación pausada y adecuada como su principal. Saber reglar un coche, por ejemplo. "Creo que sí, esos tres años extra de categorías inferiores pueden ayudar. Una de las razones por las que me ficha Red Bull es mi conocimiento técnico, que les enseñé en el simulador y en los test", reconoce Sainz.
Sus objetivos para el fin de semana con claros y no modestos. "Terminar la carrera y la calificación, que siempre es importante. El segundo es que, tanto el equipo como yo queremos estar en la Q3 [los 10 mejores de parrilla] y los puntos y hay que trabajar para ello. Aprender, aprender y aprender", recita el español.
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No está Fernando pero seguro que si pensará en tu debut, vamos campeón!
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