Fernando correrá en Oviedo

Aviso para navegantes: a todo el que quiera caminar (si puede) por el centro de Oviedo el próximo 5 de septiembre se le aconseja hacerlo provisto de un par de tapones para los oídos. ¿Y eso? Pues porque la zona noble de la ciudad, su eje comercial, una milla de oro convertida desde hace años en un paraíso para peatones, perderá algunas de sus señas de identidad para vestirse de circuito de Fórmula 1. Fernando Alonso lo ha conseguido y, finalmente, ha logrado que el equipo Renault fije para el sábado 5 de septiembre una exhibición sobre el asfalto de algunas de las calles más señeras de la capital del Principado. Lo adelantó LA NUEVA ESPAÑA en su edición del 27 de mayo y desde entonces las gestiones se han ido encadenando hasta dar con la confirmación. Fuentes de Renault lo daban ayer por hecho y situaban el acontecimiento en el fin de semana a caballo entre los grandes premios de Bélgica e Italia. La plaza de América, Toreno y parte de la calle Uría harán las veces de circuito, unos 1.800 metros entre ida y vuelta para un día irrepetible: un bicampeón del mundo de Fórmula 1 acelerando a fondo en suelo carbayón. Será, eso sí, con el R28, es decir, el coche del año pasado. Fernando Alonso será Cristiano Ronaldo en Oviedo. Las costuras de la ciudad crujirán como lo hizo el otro día el Bernabeu y las previsiones pueden quedar ridículas. En Renault dicen que se llegaría a 100.000 personas. El equipo de Roadshow -así llaman estas exhibiciones- es experto. Saben que Alonso tiene tirón en casa, pero quizá no cuentan con que el acontecimiento hará efecto llamada en todo el país. El mismo día que LA NUEVA ESPAÑA adelantó la posibilidad, los foros de internet se llenaron de intenciones de visita desde muchos rincones de la Península. En los años de las victorias, Madrid y Sevilla contaron con su Roadshow. Y reventaron de aficionados. A Fernando Alonso le quedaba clavada la espina de su ciudad. Su casa, su gente. Lo llevaba muy dentro y se repetía a sí mismo que algún día lo conseguiría y dejaría pequeños sus multitudinarios saludos de final de año desde el balcón del Ayuntamiento. «Estoy entusiasmado por conducir un F1 en Oviedo y es una bonita forma de agradecer a la gente el apoyo de muchos años», dice Alonso a la vez que se confirma la fecha de la exhibición. Ese día de septiembre, gran aperitivo para las fiestas de San Mateo, tendrá sabor a despedida. Alonso se ha asegurado cumplir su deseo este año por si al acabar el ejercicio resulta que su mono pasa a ser rojo. Así salió vestido ayer en la revista italiana «Autosprint», una biblia de la F1, que publicó en su portada un montaje con el asturiano y los colores del Cavallino, asegurando que su paso a Ferrari quedaría sellado el 15 de noviembre. «La Gazzetta dello Sport» metía a Raikkonen en la operación y señalaba la posibilidad de que rescindiera su contrato (28 millones mediante) para abrir paso al asturiano. Todo esto sucedía mientras los rescoldos de la batalla entre la FIA y los equipos se reaviva. Lo que debía ser una reunión rutinaria en Nürburgring, donde, por cierto, se corre este fin de semana, acabó en un confuso cruce de comunicados con versiones contradictorias sobre un nuevo desencuentro. Se esperan novedades.

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Tendremos a Fernando el 5 de Septiembre en pleno centro de Oviedo con el r28, él se esmeró porque quiere estar con nosotros, será con el r28 pero estará, no se si podré ir ya que ese mes tengo trabajo extra, cada vez que viene Fernando me pasa algo parecido, lo procuraré desde luego