domingo, 2 de noviembre de 2008

Los errores que pueden decidir el título en el circuito de Interlagos







El circuito de Interlagos vuelve a ser juez y parte del desenlace final del Mundial de Fórmula 1. El año pasado el trazado brasileño fue testigo de como Lewis Hamilton cometía un error de libro, achacado por muchos a su falta de experiencia, que puso en bandeja a Kimi Raikkonen el título. Este año todas las miradas se centran de nuevo en el británico y en el interrogante de ver si de nuevo un fallo individual privará a McLaren del campeonato de pilotos.Y es que Hamilton llega a Brasil con la premisa de que no se repita el famoso error del volante del año pasado -el británico aseguró haber apretado el botón del 'pit lane' en plena carrera- y arropado por McLaren, que no quiere que nada distraiga a su estrella de aquí a la carrera del domingo.Muchos aseguran que el piloto británico ha madurado en este su segundo año de competición, pero lo cierto es que, si repasamos carrera a carrera lo sucedido a lo largo de esta temporada, el resultado es que Hamilton ha cometido más errores si cabe este año, aunque no menos que los que ha perpetrado su gran rival en la lucha por el título, Felipe Massa. Tal para cual, basta con echar la vista atrás y recordar como ha ido transcurriendo el campeonato para darse cuenta de que esta vez el triunfo final será para aquel que la haya 'fastidiado' menos a lo largo del año.
Pésimo bagaje inicial de MassaTodo arrancó con las primeras carreras de Australia y Malasia, de la mano del propio Massa. El brasileño, que por entonces no era un serio candidato al título al estar a la sombra de su compañero y vigente campeón del Mundo, Kimi Raikkonen, firmó un pésimo bagaje inicial. En Albert Park, el de Ferrari rompió en la vuelta 29 después de que virages antes se empeñara en entrar por un hueco que no existía y embistiera a David Coulthard. La presión de solventar su 'metedura de pata' le duró hasta Sepang, donde terminó pagando su osadía con una salida de pista al intentar acortar en la sexta curva. La situación le dejaba en mal lugar: cero puntos y ninguna carrera acabada.Pero en Bahrein el brasileño pudo resarcirse no sólo acabando la carrera, sino logrando su primera victoria, al tiempo que le cedió el testigo de los errores a Hamilton. El inglés volvió a liarse con los botones y se quedó clavado en la salida, lo que hizo perder los nervios de inicio y propició que acabara subido encima del alerón de Alonso para terminar decimotercero, sin puntuar.Las pruebas en España, Turquía y Mónaco marcaron un tiempo de relativa tranquilidad para ambos pilotos, incluso a Hamilton le sonrió la suerte en Montecarlo tras un nuevo choque con Alonso que le hizo ir a parar contra la barrera en la piscina en la vuelta cinco. Pero como dice la voz popular, era la calma que precedía a la tempestad que llegaría en Canadá.
Hamilton y el semáforo en rojo de CanadáEl asfalto del Gilles Villeneuve fue escenario de una de las mayores 'hamiltonadas'. El inglés entró boxes junto a Kubica, Raikkonen, Rosberg y Alonso, pero la rapidez de los mecánicos de dos de sus rivales, Ferrari y BMW, coló al finlandés y al polaco por delante. Ambos frenaron viendo el semáforo rojo, pero no así Hamilton, que llegó desatado por detrás e impactó contra el Ferrari número 1 desplazándolo diez metros, dejando ambos coches (el suyo y el de Kimi) inservibles.
Una embestida que le costó cumplir en Magny-Cours una sanción de diez puestos en parrilla, donde además fue castigado con un drive through (pasar por dentro del muro sin parar) por saltarse una chicane mientrás veía como Massa se alzaba con el liderato en el Mundial. Pero las tornas volverían a girarse en Gran Bretaña, donde Hamilton ganó con total autoridad en casa en un gran premio en el que su rival de Ferrari se erigió como el 'rey de los trompos' -hasta cinco se le pudieron contabilizar al brasileño en esa carrera- que le relegaron al puesto decimotercero.La prueba de Alemania se saldó con un nuevo triunfo para la estrella de McLaren (con Massa tercero) y, cuando parecía que Hungría sería ecenario de su tercera victoria consecutiva, el inglés volvió a fastidiarla: la responsabilidad de su quinto puesto final cuando partía con la 'pole' fue completamente suya y de su ansiedad por adelantar en una carrera en la que Massa rompió cuando era líder.
La polémica de BélgicaDespués de una nueva victoria del brasileño de Ferrari en Valencia, escoltado por el propio Hamilton, llegó la carrera más controvertida: Bélgica. La FIA decidió dar la victoria al brasileño -segundo sobre el asfalto- al sancionar al británico (ganador en el asfalto) con 25 segundos por conducta antideportiva en un lance con Raikkonen que le relegó finalmente sobre el papel a la tercera posición del podio.Si la carrera de Bélgica fue controvertida, de la de Italia podemos decir que fue atípica. Los grandes favoritos se quedaron en la jornada del sábado fuera de la Q3 y la carrera deparó un sexto puesto para Massa, seguido por Hamilton en la séptima posición.Y entonces llegaron las carreras de Singapur y Japón y las victorias de Alonso. En la primera el error vino por parte de Ferrari, que tiró por tierra casi todas las posibilidades de su piloto en el Mundial en una salida esperpéntica del 'pit lane'. Los mecánicos le dieron el 'ok', pero se olvidaron de recoger la manguera y tuvieron que ir corriendo detrás para sacársela. Mientras, Hamilton, que acabó tercero, se frotaba las manos.
Errores de ambos en JapónEn tierras niponas el protagonismo en el capítulo de infortunios se lo llevó Hamilton, que tenía la pole, con una nefasta salida. Al llegar a la primera frenada el inglés se percató de que Raikkonen iba a superarle y apuró tanto la frenada que se pasó y acabó cruzado en mitad de la pista por delante del propio Massa. Cinco vueltas más tarde el del McLaren era sancionado con un drive through por echar de la pista a Kimi, lo mismo que el brasileño, por tocar al inglés en la curva 11. Regresarían 12 y 14 sin posibilidades, aunque Massa logró remontar hasta los puntos (séptimo).China devolvió la 'normalidad' al campeonato -ganó Hamilton por delante de Massa- y ahora espera el gran final de Brasil, donde los nervios pueden jugarle de nuevo una mala pasada al del McLaren. Sus rivales se han encargado de transmitirle toda la presión. Ferrari sabe que solo le queda ganar y "esperar acontecimientos", como
confesaba Gené en los micrófonos de MARCA.com.A falta de que llegue el próximo domingo y podamos ver lo que ocurre lo que sí parece cierto es que aquel que pierda no parará de recordar y arrepentirse de sus errores pasados, los que le harán perder la corona de la Fórmula 1.




Aquí tenemos un resumen de los errores que se han ido produciendo a lo largo del año, en este campeonato que se ganará con tan poquísimos puntos, ninguno de los aspirantes al título han hecho honor al coche que tienen, Kimi en este terrible año que no sabemos qué le pasa, ya que se iba, no se va... pero lo cierto es que no está, Massa ha tenido además de no una gran cabeza, muchas veces, mala suerte, como cuando rompió el motor ( ambos partieron con un cohe superior al resto y ahora mismo esperan un golpe de suerte para ser campeones), Hamilto, lleva en su forma de ser su catigo, ese creerse el mejor piloto de la historia ( que ya fastidia tú después del desastre del pasado año ) , esa prepotencia de niño mal criado le puede llevar para perder por segundo año consecutivo un campeonato que ya tenía ganado, eso sin contar conque repite motor y ya hemos visto lo que le sucedió a Kovalainen en China, a Ferrari se le rompieron los dos motores uno tras otro.


Todo lo anterior sucede porque el piloto mejor de la actualidad no está con un coche puntero y apollado por su escudería, creo que podría haber sido casmpeón con unos 135 o 140 puntos




2 comentarios:

pro_magicalonso dijo...

Si no hubiera habido la cantidad de errores que ha habido quizás el título ya se habría decidido, por eso ninguno de estos dos pilotos se merece el título porque no están a la altura.SAludos

silvo dijo...

No están, para nada, a la altura que requiere la superioridad de sus escuderías, no.Saludos