Tres puntos más que Ferrari. Eso era lo que necesitaba Mercedes para proclamarse campeón de constructores en Rusia. No parecía muy descabellado pensar en celebraciones con sus dos pilotos en primera línea de parrilla.
Pero la cosa se torció rápido, y con el abandono de Rosberg tocaba encomendarse a Hamilton y esperar que Vettel y Raikkonen no sumasen más de 22 puntos. El británico terminó cumpliendo, pero la plata de Vettel y el quinto puesto de Raikkonen obligaban a Toto Wolff a reservar el champán para Austin, como el año pasado.
Haciendo las maletas estaban cuando la FIA anunciaba unasanción de 30 segundos a Kimi por golpear el monoplaza de Bottas y sacarle de la pista. El finés quedaba relegado a la novena posición, privando a su equipo de 8 puntos y a la postre dando el título a la escudería germano-británica.
A falta de cuatro carreras Mercedes se asegura su segundo título de constructores en una temporada impecable en la que sus pilotos han ganado en 12 de las 15 carreras disputadas y han sumado 531 puntos hasta la fecha.
Marca
Felicidades a Mercedes que menudo coche tienen
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